Este lunes vivimos una emocionante noche de arte, expresión, música en vivo y de encuentro entre sobrevivientes y personas significativas, 200 invitados que ahora forman parte de la comunidad de Fundación La María. Cada día somos más, y los espacios que juntos vamos construyendo se convierten en lugares estimulantes y amorosos para sentirnos acompañados, apoyados, validados, visibilizados y empoderados.
No podemos dejar de agradecer la participación de los talentos que protagonizaron la velada. Flor de Caramelo, banda que además de cautivarnos con sus canciones, nos abrazó con sus discursos como sobrevivientes y personas significativas. Los artistas visuales que con mucho cariño nos confiaron la exhibición de sus obras. Ignacio Henriquez que nunca deja de sorprendernos con sus dibujos híper realistas que incluso parecieran ser fotografías de extractos de su propia experiencia vital en su tránsito como resignificador y Paula Izquierdo que nos conmovió con su representación tan potente acerca de la conocida cifra negra del abuso sexual infantil. Nuestras queridas artistas escénicas, las bailarinas Carolina Cortéz y Ángela Fuentes, que nos emocionaron hasta las lágrimas con su performance, Manifiesto Resiliente. Y finalmente Nicolás Poblete, que nos invitó a gozar al ritmo de su amoroso reggae.
Queremos extender los agradecimientos también a las marcas que quisieron hacerse presentes durante la noche, Hasta Pronto, Varsovienne, Chandon, Bar Mañío, Ade Ene y especialmente a la artista visual Verónica García-Huidobro. Y…¡Cómo no! A nuestros amigos de Oculto Beer Garden que hicieron posible este evento.